2.2.20

Limpiezas energéticas

Todos hemos escuchado en alguna ocasión que la atmósfera de un lugar es muy densa o que un objeto nos da malas vibraciones. Seguramente incluso lo habremos escuchado de una persona. En estos casos, llevar a cabo una limpieza energética es una idea muy acertada, pero ¿qué es una limpieza energética?

Una limpieza energética es el procedimiento por el cual se eliminan de una persona, objeto o espacio las energías nocivas que este pueda contener. Dichas energías, sea como sea que hayan sido adquiridaspodrían ser las causantes de bloqueos y desequilibrios en distintos niveles. Por ello, todos los que trabajamos de alguna u otra forma con energías sabemos lo importante que es mantener una adecuada higiene energética que aleje de nuestro entorno, y de nosotros mismos, esas posibles energías dañinas.


Llevar a cabo una limpieza energética es sencillo, útil y no suele llevarnos mucho tiempo, por lo que es aconsejable hacerlas con regularidad. A la hora de detectar las energías discordantes, guíate siempre por tu intuición y elige un método de limpieza que se adecue a las características concretas del objeto o del espacio a tratar. Finalmente, y si te surge la duda sobre si limpiar o no un espacio, objeto o persona, mi consejo es que lo hagas. Te quedarás más tranquilo.

A continuación encontrarás los métodos más comunes para realizar limpiezas energéticas pero, sea el que sea que practiques, visualiza siempre cómo las energías negativas se desprenden, se alejan o se destruyen. Son estos:

- Poner bajo el agua del grifo el objeto: es la forma más rápida y fácil de limpiar objetos, como cuarzos y joyas energéticas. Visualiza en este caso cómo la energía oscura se va por el desagüe hasta que sólo ves en él energía blanca y pura.

- Colocar el objeto a la luz del sol: deja que la luz solar caliente y limpie el objeto. Además, debes saber que pasear bajo la luz del sol recargará tus pilas y te dará vitalidad, y si estás rodeado de naturaleza, mucho mejor.

- Introducir el objeto en un cuenco con agua salada y dejarlo sumergido unos instantes. A continuación, sácalo y sécalo con un trapo limpio. Si vives en un lugar costero, puedes hacer lo mismo con el agua del mar.

- Pasa el objeto por el humo de un incienso o de un sahumerio de hierbas compuesto, por ejemplo, de romero, ruda o palo santo, o incluso, una mezcla de varias. Si decides pasar el sahumerio por una habitación, pásalo en sentido horario.

Con Reiki: si estás iniciado en esta terapia complementaria puedes limpiar objetos dándole unos minutos de Reiki (más o menos tiempo en función de su tamaño). Si se trata de un espacio, traza Cho Ku Rei en las 4 esquinas superiores de la habitación, y a continuación, en el suelo y techo.

- Colocar el objeto bajo la luz de la luna, preferiblemente cuando está llena. Puedes dejarlo varias noches si lo deseas. Esta técnica es muy habitual para limpiar objetos esotéricos y mágicos.

- Poner una maceta de ruda en la habitación. Es un método ideal para espacios de trabajo como oficinas y despachos, pues además de decorarlos, esta planta absorberá las energías negativas que haya en el ambiente. Situar un antahkarana en la sala ayudará 
también a mantenerla limpia energéticamente.

- Meditar: practicar la meditación es una forma maravillosa de limpiarte interiormente. Para ello, visualiza cómo al inspirar te llenas de energía blanca y cómo al exhalar expulsas humo o energía gris acompañada de emociones negativas. Te sentirás liberada. 

Aparte de estos métodos, que en ocasiones puedes combinar, existen otros muchos. También puedes diseñar los tuyos propios o rediseñar los ya existentes, pero siempre teniendo en cuenta el principio básico de la visualización que ya he descrito.

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Energía, luz y amor.