18.8.18

Reiki y religión

Son muchas las personas que, según he podido observar a mi alrededor, no se acercan ni practican Reiki debido al fuerte arraigo que las creencias religiosas tienen en su vida, las cuales ejercen un freno psicológico que les impide aproximarse a otras formas de entender la realidad. Sienten, de algún modo, que estas prácticas energéticas son contrarias a su fe tradicional.

  
      


Éste es el caso del Reiki y la religión, un tema siempre controvertido que pone de manifiesto 2 partes a priori, irreconciliables y excluyentes. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Debemos pensar que el Reiki, como terapia energética, consiste sólo en la canalización de Energía, principalmente a través de las manos, para armonizar nuestro cuerpo, mente y espíritu, lo cual es totalmente compatible con cualquier otra práctica religiosa o credo personal. Por tanto, el Reiki visto de esta forma, viene a evidenciar y trabajar el cuerpo energético del ser humano, que nada tiene que ver con la religión, y que por consiguiente, no puede dar lugar a conflictos personales internos.

Sin embargo, parece inevitable que una persona, cuando empieza a practicar Reiki, se plantee cómo encajar esa nueva visión con sus convicciones religiosas. Y es ahí donde entran en juego los conocimientos que se imparten durante los cursos de formación de Reiki, que nos enseñan a ver cómo esta terapias complementaria no exige en ningún momento cambiar, modificar o abandonar nuestras creencias personales.

Si echamos mano de las Escrituras Sagradas de cualquier religión, nos daremos cuenta que la imposición de manos para canalizar energía y favorecer la sanación de los enfermos, es una técnica que la humanidad ha utilizado casi desde tiempos inmemoriales. Además, no ha sido patrimonio exclusivo de una sola cultura sino de varias, tal y como lo demuestra que personajes históricos tan relevantes y distintos como Jesús de Nazaret, Buda Gautama y Mahoma, hombres que son considerados verdaderos guías espirituales llevaran a cabo sus sanaciones mediante la imposición de manos, es decir, la misma técnica que se emplea en Reiki. En este sentido, podemos pensar que el Reiki y la religión están mucho más próximos de lo que parece.

Finalmente, y es tan sólo mi opinión, creo que todos los conocimientos deben ser relativizados y sometidos a nuestro juicio y experiencias. Además, es aconsejable permanecer abiertos a nuevas formas de conocimiento más evolucionadas y no quedarnos estancados en creencias desfasadas. La fe y la transmisión de Energía no están reñidas, por lo que no hay motivo alguno para renegar de ninguna de ellas.

Gracias por leerme y dejar tus comentarios abajo si lo deseas. 

Energía, luz y amor.