24.7.16

No te detengas. No lo digo yo

Hoy quiero compartir con vosotros un precioso poema de Walt Whitman (1819-1892) que me han enviado, y que es perfecto para leer y meditar cuando sintamos que nuestras fuerzas flaquean y que nuestros valores decaen, y sentimos que necesitamos remontar nuestro ánimo, recuperar nuestro optimismo y retomar las riendas de la vida para seguir adelante.




Es un poema con una gran carga emocional, que refleja pensamientos, ideas y actitudes que todos hemos tenido en algún momento, y que sin embargo nos alienta a continuar con nuestra vida manteniendo una actitud positiva.

Piensa cada frase, analiza los detalles y lee entre líneas. Descubre en este bello poema mucho más de lo que las letras muestran, y piensa en cómo se puede aplicar a tu vida y a la búsqueda de tu felicidad evitando las emociones y sentimientos negativos. Dice así:


NO TE DETENGAS

No dejes que termine el día sin haber crecido un poco,
sin haber sido feliz, sin haber aumentado tus sueños.
No te dejes vencer por el desaliento.
No permitas que nadie te quite el derecho a expresarte,
que es casi un deber.
No abandones las ansias de hacer de tu vida algo extraordinario.
No dejes de creer que las palabras y las poesías
sí pueden cambiar el mundo.
Pase lo que pase nuestra esencia está intacta.
Somos seres llenos de pasión.
La vida es desierto y oasis.
Nos derriba, nos lastima,
nos enseña,
nos convierte en protagonistas 
de nuestra propia historia.
Aunque el viento sople en contra,
la poderosa obra continúa:
Tu puedes aportar una estrofa.
No dejes nunca de soñar,
porque en sueños es libre el hombre.
No caigas en el peor de los errores:
el silencio.
La mayoría vive en un silencio espantoso.
No te resignes.
Huye.
"Emito mis alaridos por los techos de este mundo",
dice el poeta.
Valora la belleza de las cosas simples.
Se puede hacer bella poesía sobre pequeñas cosas,
pero no podemos remar en contra de nosotros mismos.
Eso transforma la vida en un infierno.
Disfruta del pánico que te provoca
tener la vida por delante.
Vívela intensamente,
sin mediocridad.
Piensa que en ti está el futuro
y encara la tarea con orgullo y sin miedo.
Aprende de quienes puedan enseñarte.
Las experiencias de quienes nos precedieron
de nuestros "poetas muertos",
te ayudan a caminar por la vida.
La sociedad de hoy somos nosotros:
Los "poetas vivos".
No permitas que la vida te pase a ti sin que la vivas...



Léelo cada vez que necesites una dosis extra de energía para afrontar o continuar tu día, o incluso para despedirte de él y recobrar la confianza en ti.

¿Te ha gustado? ¿cuáles son tus versos favoritos? ¿qué te ha trasmitido este poema?

La versión que presento en este artículo es de Leandro Wolfson.

No te detengas, te lo dice Walt Whitman.

Energía, luz y amor.